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lunes, 25 de agosto de 2014

No, el blog no ha muerto...


Bueno... muchachos y muchachas, sé que hace ya un montón de semanas que no publico nada, y además no he dado apenas señales de vida. Espero que esta breve entrada sirva para redimirme un poco, y contaros cuál es la nueva situación del blog (y la mía personal, que está todo relacionado, claro).

Como ya sabéis algunos, mi situación personal era un poco complicada, sobre todo en lo relacionado con lo laboral. Como mi caso no es "especial" (somos muchos millones en las mismas apreturas), no me extenderé demasiado sobre ello. La cosa ha estado muy, muy difícil, eso sí. Y deprimente. El caso es que allá por julio me quise conceder unos días de descanso bloguero, sobre todo para centrarme en asuntos más imperativos y de supervivencia. Y resulta que, sorprendentemente, ha sonado la flauta: He encontrado un trabajo como formador, y por fin me reintegro en el mercado laboral "normal". El caso es que esta nueva oportunidad se me ha presentado un poco lejos de mi hogar (me voy a Lituania, nada menos), así que estas últimas semanas han sido harto ajetreadas entre compras y papeleos diversos. Total, que he tenido la cabeza en otro sitio, y he apartado un poco mi vida internáutica para centrarme en lo urgente. 

¿Qué haré a partir de ahora? Bien, el primer escollo para continuar con el blog lo he salvado a medias. He tenido que renunciar a mi equipo de escritorio, con el que grababa y editaba los vídeos, y me he hecho con un portátil. Tras cruzar los dedos y un par de arreglos sobre la marcha, parece que Ubuntu funciona razonablemente bien en mi nuevo ordenador, así que ya puedo decir oficialmente que continuaré grabando cosas. Eso sí, la calidad de vídeo va a bajar un poco: la resolución pasará de los 1080 a unos modestos 720, aunque espero que el resto de parámetros de calidad se mantenga. Tampoco tengo mucha idea de la periodicidad de publicación de nuevos tutoriales; mis nuevas responsabilidades me van a tener bastante ocupado, así que no prometo nada. Pero lo que sí os aseguro es que a partir de mediados del mes que viene volveré al ataque con más vídeos y con mi horrible prosa en el blog. 
A todos aquellos que os habéis interesado por mi situación y que me habéis escrito preguntando qué era de mi, os quiero pedir disculpas y daros las gracias. Disculpas por no haberos contestado (lo voy a hacer, pero poco a poco, han sido muchos correos), y gracias por hacerme sentir que el blog es seguido y que genera interés. Sinceramente, es un apoyo que nunca me ha faltado a lo largo de la existencia de este blog, y la principal razón para continuar publicando. 
Ah, y una cosa más: a todos los responsables de la situación social y laboral que vive este país, y a los que han permitido que una generación completa de españoles se arruine y tenga que recurrir a la emigración, un mensaje: Os maldigo, con todas mis fuerzas. Si fuese creyente sabría que terminaríais en el infierno por el mal que estáis provocando. No lo soy, y lo único que me consuela es confiar en que lo poco que os queda de humanidad os esté taladrando la cabeza con la idea de que terminaréis pagando con creces el dolor, el sufrimiento y la pobreza que habéis desencadenado. Os merecéis todo el mal que os pase. Que os den, políticos. Que os den, banqueros. Que os den, empresaurios... yo me largo. 

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