Casualmente le ha tocado a Ubuntu finalizar el año en Unade25. O quizá no tan casualmente, eso ya lo dejo a la libre especulación por vuestra parte. Sea como fuere, hoy os traigo un truco muy sencillo para solucionar otro pequeño problema del bueno de Unity, que no deja de darnos estas pequeñas "alegrías".
A veces Unity me recuerda a un anciano achacoso... o mejor, a un viejo submarino de primera generación, de aquellos que parecían una especie de sobredimensionados supositorios, pero con tecnología no muy recomendable, y menos para ir imitando a los atunes por los abismos pelágicos. Un viejo submarino lleno de pequeñas fugas, que no constituyen un problema gracias a la paciente labor de la marinería, que armada de engrudo (no tengo ni idea de cómo se reparan las fugas en los submarinos, pero yo me imagino que lo hacen con engrudo, que para eso es mi paja mental) va taponando los agujeros; pero la tarea se vuelve interminable dado que el fatigado metal del casco se va agrietando más y más, de forma que a cada agujero taponado le sucede otro nuevo, y así hasta el infinito.
Alt + F2, ese desconocido |
Perdonadme la metáfora, pero es que a veces el tema del vídeo no me da para escribir un artículo de más de dos líneas, y tampoco me parece elegante despedir el 2013 con un tuit.
Lo dicho, que si os desaparece el panel de fecha y hora os marquéis un
killall unity-panel-service
Y listo. Ya podría ser igual de fácil restaurar otras cosas, pero parece que los comandos de Linux son igual de utópicos que la propia filosofía del software libre. Esperemos que el 2014 nos traiga más utopía de la buena, que al menos la imaginación y los deseos no nos los van a conseguir quitar.
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