Pero no os apenéis, Steam volverá seguro, ya sea como protagonista o estrella invitada, pero siempre quedará un hueco para él en este blog y en todos nuestros corazones. Otros llegarán y ocuparán su hueco, pero ninguno podrá sustituirle en este lugar, en este rincón...snif, snif. (voy a acabar llorando y todo).
Aún así, como todos los buenos protagonistas, Steam nos deja reservando lo mejor para el final. Aquel último truco de los buenos prestidigitadores que hace a los espectadores, hasta ese momento escépticos con las capacidades del mago, levantarse de sus asientos y aplaudir y aplaudir sin resuello.
Este último truco, señores, es el BIG PICTURE:
Claro y distinto ¿no?. Fuente: Webguyunlimited.com |
Como podéis observar en esta imagen la idea central del Big Picture es cristalina. Posibilitar la capacidad de jugar con Steam en tu televisor habitual. Vamos, en tu pedazo de pantalla de 47 pulgadas. En tu salón, en tu sillón de orejas con tu refresco, pero sin los ganchitos que luego ensucias el mando.
Vamos es como si tuvieses un HTPC pero sin la T, es decir, un HGPC. Un Home Gaming Personal Computer. O algo así vamos.
Desde está aplicación de Steam, que por cierto los usuarios de Ubuntu podemos abrir directamente sin pasar por el resto del sistema (Fuck you Windows!), podemos además tener acceso a un navegador (simple pero completo) que nos permitirá navegar por Internet con un mando de consola habitual. En resumen, es un programa que transforma nuestro contacto con los juegos a una interfaz muy similar a la que encontraríamos en una Xbox o en una Playstation. Y todo, para la comodidad de jugar en una TV.
Poco más se puede decir del Big Picture, puesto que todas las funcionalidades que incluye son las mismas que podemos observar en la interfaz clásica de Steam (o por lo menos las más importantes).
Sólo queda ponerse con él y disfrutarlo.